Resumen Breve
Este video de Biología con Alice Rodríguez explica la herencia autosómica dominante y recesiva, diferenciándola de la herencia ligada al sexo. Se enfoca en cómo realizar cruces genéticas (cuadros de Punnett) para predecir la probabilidad de heredar enfermedades genéticas.
- Herencia Autosómica Dominante: Basta con que un padre transmita un gen mutado para que el hijo tenga la enfermedad (50% de probabilidad).
- Herencia Autosómica Recesiva: Ambos padres deben ser portadores del gen mutado para que el hijo tenga la enfermedad (25% de probabilidad).
- Se explica cómo identificar portadores y cómo las diferentes combinaciones genéticas de los padres afectan las probabilidades de que los hijos hereden o porten la enfermedad.
Introducción a la Herencia Autosómica
La clase continúa el tema de genética no mendeliana, enfocándose en la herencia autosómica dominante y recesiva. A diferencia de la herencia ligada al sexo, la herencia autosómica no depende del sexo del individuo, ya que se transmite a través de los cromosomas no sexuales (cromosomas somáticos 1-22). Se realizarán cruces genéticas para calcular las probabilidades de heredar enfermedades autosómicas.
Herencia Autosómica Dominante
En la herencia autosómica dominante, si uno de los padres porta un solo gen mutado, existe un 50% de probabilidad de que sus hijos hereden la enfermedad, independientemente de si son hombres o mujeres. No importa si el padre o la madre es quien presenta la enfermedad, la probabilidad de transmisión es la misma.
Herencia Autosómica Recesiva
Para que una persona manifieste una enfermedad autosómica recesiva, ambos padres deben ser portadores de un alelo mutado. En este caso, hay un 25% de probabilidad de que los hijos (hombres o mujeres) desarrollen la enfermedad, un 50% de probabilidad de que sean portadores y un 25% de probabilidad de que estén completamente sanos. Este tipo de herencia sigue las leyes de Mendel. Se explica que en los diagramas genealógicos se deben incluir abortos, tíos y abuelos para rastrear el origen de la enfermedad.
Enfermedades Autosómicas Dominantes
Una persona con una enfermedad autosómica dominante debe tener al menos un alelo mutado para manifestar la enfermedad. Ejemplos de enfermedades autosómicas dominantes incluyen la acondroplasia, la enfermedad de Huntington, la neurofibromatosis y el síndrome de Marfan. Si una persona tiene acondroplasia, la mitad de sus hijos también la tendrá. Se explica la diferencia entre homocigotos (dos alelos iguales) y heterocigotos (dos alelos diferentes) en el contexto de estas enfermedades.
Enfermedades Autosómicas Recesivas
Para las enfermedades autosómicas recesivas, se requieren dos copias del gen mutado (una del padre y otra de la madre) para que la enfermedad se manifieste. Las personas con un solo gen mutado son portadoras y no desarrollan la enfermedad. Ejemplos de enfermedades autosómicas recesivas incluyen la fenilcetonuria, la osteogénesis imperfecta y la ictiosis arlequín. Se presenta un esquema de herencia donde ambos padres son portadores, resultando en un 25% de hijos enfermos, 50% portadores y 25% sanos.
Cruzas Genéticas: Autosómica Dominante
Se realizan varios ejemplos de cruzas genéticas utilizando cuadros de Punnett para ilustrar las diferentes posibilidades de herencia autosómica dominante. Se consideran escenarios donde uno de los padres es heterocigoto para la enfermedad, ambos padres son homocigotos para la enfermedad, y ambos padres son heterocigotos. Se calculan las probabilidades de tener hijos sanos o enfermos en cada caso.
Cruzas Genéticas: Autosómica Recesiva
Se exploran diferentes escenarios de cruzas genéticas para la herencia autosómica recesiva. Se analizan casos donde ambos padres son portadores, uno de los padres es homocigoto recesivo (enfermo) y el otro es portador, y donde ambos padres son sanos pero uno es portador. Se calculan las probabilidades de tener hijos sanos, portadores o enfermos en cada situación. Se destaca la importancia de las pruebas genéticas para determinar el estado de portador y las probabilidades de transmitir la enfermedad.