Breve Resumen
El video explica cómo se crea la cosmovisión de una persona, utilizando el acróstico "CREA" para abordar cuatro elementos clave: Contexto, Relaciones, Experiencias y Aprendizajes.
- El contexto abarca la época, ubicación geográfica, fenotipo y genotipo.
- Las relaciones incluyen las familiares, sociales, de pareja y laborales.
- Las experiencias se dividen en agradables y desagradables.
- Los aprendizajes comprenden mensajes morales, conocimientos profesionales y convenciones sociales.
El video destaca que la combinación única de estos elementos hace que cada persona tenga una cosmovisión irrepetible, subrayando el valor individual y la importancia de la propia perspectiva en el mundo.
Contexto: Época, Ubicación, Fenotipo y Genotipo
El contexto es fundamental en la formación de la cosmovisión. La época en la que vivimos, marcada por la tecnología y las diferencias económicas, influye en nuestra perspectiva. La ubicación geográfica también es crucial, ya que no es lo mismo nacer en un lugar que en otro, incluso dentro del mismo país. El fenotipo, es decir, nuestro aspecto físico, y el genotipo, nuestra carga genética, también son parte de nuestro contexto y afectan cómo somos tratados y cómo vemos el mundo.
Relaciones: Familiares, Sociales, de Pareja y Laborales
Las relaciones que establecemos juegan un papel importante en la construcción de nuestra cosmovisión. Las relaciones familiares, especialmente la relación entre nuestros padres, influyen en nuestra idea de cómo son las parejas. Las relaciones sociales, como las amistades y las relaciones laborales, también nos influyen y determinan nuestra manera de percibir la realidad. Las relaciones de pareja, en particular, tienen un impacto significativo en cómo vemos las cosas, ya que la pareja puede influir en nosotros de diversas maneras.
Experiencias: Agradables y Desagradables
Las experiencias, tanto agradables como desagradables, influyen en nuestra cosmovisión. Las experiencias agradables refuerzan nuestras creencias y nos hacen ver el mundo de manera positiva. Las experiencias desagradables, por otro lado, pueden generar prejuicios y afectar nuestra manera de interactuar con los demás. Es importante reconocer que las experiencias influyen en nuestra cosmovisión, pero no deben determinarla por completo.
Aprendizajes: Mensajes Morales, Conocimientos Profesionales y Convenciones Sociales
Los aprendizajes son otro factor clave en la formación de nuestra cosmovisión. Los mensajes morales que recibimos desde la infancia, aunque no siempre sean correctos, influyen en nuestra percepción del bien y del mal. Los conocimientos profesionales que adquirimos en nuestra formación académica también moldean nuestra manera de ver el mundo. Las convenciones sociales, es decir, las reglas y normas de comportamiento en público, también forman parte de nuestro aprendizaje y determinan nuestra interacción con la cultura.
Cosmovisión Única y el Valor Individual
La combinación única de contexto, relaciones, experiencias y aprendizajes hace que cada persona tenga una cosmovisión irrepetible. No hay dos personas con una cosmovisión idéntica, lo que subraya el valor individual y la importancia de la propia perspectiva en el mundo. Cada persona es única y tiene algo valioso que aportar, por lo que es fundamental reconocer el sentido de la propia existencia y contribuir a construir un mundo mejor.
