Breve Resumen
Este video describe la expansión del Imperio Otomano desde sus humildes comienzos en el siglo XIV hasta su apogeo en el siglo XVII. Se destacan las conquistas clave, incluyendo la toma de Constantinopla en 1453 y las expansiones bajo Solimán el Magnífico. También se mencionan los territorios vasallos y las fluctuaciones en el control de ciertas regiones.
- El Imperio Otomano comenzó como un pequeño reino y se expandió significativamente.
- La toma de Constantinopla en 1453 fue un evento crucial en su ascenso.
- Solimán el Magnífico impulsó una gran expansión territorial.
- El imperio alcanzó su máxima extensión en 1683, siendo una potencia dominante en el Mediterráneo.
Orígenes y Expansión Inicial
A principios del siglo XIV, el Imperio Otomano era un pequeño reino al este del Mar de Mármara, con su capital en Bursa. Para 1451, este núcleo original se había expandido hacia el este y el oeste. La victoria decisiva para los turcos ocurrió en 1453 con la conquista de Constantinopla, arrebatándosela a los bizantinos.
Expansión Continua
Después de la toma de Constantinopla, la expansión otomana continuó de manera constante. Para 1520, el Imperio Otomano había ocupado Anatolia, el Oriente Próximo, el oeste de la Península Arábiga y Egipto. Además, contaba con estados vasallos como Argelia, Valaquia, Moldavia y el Janato de Crimea.
Solimán el Magnífico
Solimán el Magnífico impulsó aún más la expansión otomana entre 1520 y 1566. Durante su reinado, conquistó Hungría, áreas de Armenia y Mesopotamia, el Yemen y una franja en la costa oriental africana. También convirtió en vasallos a Túnez, Trípoli, Cirenaica y Transilvania.
Apogeo del Imperio
Entre 1566 y 1683, el Imperio Otomano continuó creciendo, llegando a las puertas de Viena y tomando Creta, Chipre, Podolia, la costa occidental de Georgia y el Hasa en la Península Arábiga. Aunque algunas conquistas en Georgia, Azerbaiyán y el Listán fueron temporales, en 1683 el imperio alcanzó su máxima extensión, convirtiéndose en la máxima potencia del Mediterráneo.
