Breve Resumen
Este video explora el significado profundo de la frase "Yo Soy" desde perspectivas filosóficas, religiosas y gnósticas, contrastando su uso en el Antiguo Testamento con el Nuevo Testamento y el Libro Secreto de Juan. Se analiza cómo la frase puede denotar tanto una conexión con la fuente creadora como una manifestación del ego, dependiendo del contexto y la intención.
- El "Yo Soy" puede ser una expresión de la presencia divina o una afirmación egocéntrica.
- La verdadera autoridad del "Yo Soy" se basa en el conocimiento interior y las acciones, no solo en la repetición de mantras.
- Reconocer y asumir la responsabilidad personal es clave para un trabajo interior auténtico y para manifestar el "Yo Soy" en la luz.
Introducción al "Yo Soy": Perspectivas Filosóficas y Religiosas
El programa inicia con una exploración del término "Yo Soy", considerado sagrado en muchas corrientes filosóficas y místicas. Se explica que pronunciar "Yo Soy" con el corazón abre las puertas a la fuente de la vida eterna, conectando con la conciencia infinita. Sin embargo, esta conexión requiere un estado mental de meditación y condiciones especiales. Desde una perspectiva religiosa, se menciona la respuesta de Dios a Moisés en Éxodo 3:14, "Yo soy el que soy", relacionándola con la presencia de Dios en cada individuo. Se advierte que negar el "Yo Soy" a través de expresiones como "no puedo" limita la conexión con la luz divina.
El "Yo Soy" en el Antiguo y Nuevo Testamento: Yahvé vs. Jesús
Se analiza la tradición religiosa del "Yo Soy" en el Antiguo Testamento, específicamente la respuesta de Yahvé a Moisés. Se establece una relación inicial entre el "Yo Soy" y Dios, pero se plantea la necesidad de diferenciar entre el "Yo Soy" expresado por Yahvé y el enseñado por Jesús en el Nuevo Testamento. Se cita Juan 8:58, donde Jesús dice "Antes que Abraham fuese, Yo soy", para mostrar cómo esta afirmación se utiliza para relacionar a Jesús con la esencia del "Yo Soy" de Yahvé. Sin embargo, se adelanta que la investigación del programa revelará que no son la misma esencia.
El Libro Secreto de Juan: Dos Esencias del "Yo Soy"
Se introduce el Libro Secreto de Juan como una fuente clave para comprender las dos esencias del "Yo Soy". Primero, se examina el "Yo Soy" pronunciado por Yahvé, buscando su origen e identidad en este documento. Se menciona el momento en que Jesús se le aparece a Juan, donde Jesús se identifica como "Yo soy el padre, yo soy la madre, yo soy el vástago", contrastando con la respuesta de Yahvé a Moisés. Luego, se analiza el momento en que Yaldabaoth, tras ser abortado de la cuarta estrella, se autoproclama como Dios, diciendo "Yo soy Dios y no hay otro Dios aparte de mí".
Yaldabaoth y el "Yo Soy" Egocéntrico: Celos y Desconocimiento
Se profundiza en la figura de Yaldabaoth, también conocido como Samael, quien, debido a su estupidez, se autoproclama como el único Dios. Esta afirmación se relaciona con las declaraciones de Yahvé en el Antiguo Testamento, donde también se presenta como el único Dios y prohíbe seguir a otros dioses. Se destaca que el "Yo Soy" de Yaldabaoth denota una identidad llena de miedo y desconocimiento, ya que no sabe de dónde proviene su propia fuerza. Se menciona que Yaldabaoth también dice "Yo soy un Dios celoso", lo que refuerza la idea de un "Yo Soy" egocéntrico y posesivo.
El Significado Hebreo del "Yo Soy": Ser o Llegar a Ser
Se analiza el significado hebreo de la frase "Yo soy el que soy" (ehyeh asher ehyeh), revelando que una traducción más precisa sería "Yo seré el que seré". Esto sugiere que Yahvé no está afirmando una identidad absoluta, sino aspirando a convertirse en un Dios para su pueblo. Se contrasta esta interpretación con la traducción común en la Biblia Reina Valera, que presenta a Yahvé como afirmando ser el que es. Se concluye que el "Yo Soy" de Yahvé denota un "llegar a ser", mientras que el Libro Secreto de Juan revela el origen de esta entidad.
El "Yo Soy" de la Luz: Conocimiento Anterior y Autoridad
Se explora el "Yo Soy" desde la perspectiva de la luz, contrastándolo con el "Yo Soy" egocéntrico de Yaldabaoth. Se mencionan citas de Jesús en el Nuevo Testamento, como "Yo soy el camino, la verdad y la vida", y se destaca que Jesús respaldaba sus palabras con acciones. Se analiza el Libro Secreto de Juan para comprender el origen de la autoridad de Jesús, mencionando que Jesús se presenta como "Yo soy el padre, yo soy la madre, yo soy el vástago" y "Yo soy el conocimiento anterior perfecto de todo". Se concluye que la autoridad del "Yo Soy" está determinada por el conocimiento anterior y la conexión con el origen mismo de la creación.
La Ley de la Conciencia del Ser Soy: Ascenso Espiritual y Reconocimiento Interior
Se introduce la séptima ley del ascenso espiritual, la ley de la conciencia del ser soy, que se vive cuando se han integrado las seis leyes anteriores. Esta ley habla de la identidad indisoluble del ser conciencia y del soy conciencia, donde el ser es la identidad lograda en encarnaciones y el soy es la esencia preexistente identificada en la luz. Se explica que el "Yo Soy" no es un mantra mágico, sino el resultado de un trabajo interior, donde primero se reconocen los errores y se asume la responsabilidad personal. Se destaca la importancia de la humildad y la acción para manifestar el "Yo Soy" en la luz.
El "Yo Soy" como Herramienta de Batalla: Identidad y Protección
Se enfatiza que el "Yo Soy" es el reconocimiento puro y fiel de la identidad del origen luz. Se advierte que las tinieblas buscan robar la identidad del ser humano para controlarlo, por lo que es crucial reconectarse con la esencia original. Se menciona que las entidades astrales buscan posesionar mentes y cuerpos, pero que un ser de la luz es mucho mayor que estas entidades. Se concluye que el "Yo Soy" se convierte en un arma de batalla en un mundo plagado de maldad, injusticia y oscuridad, protegiendo la identidad y permitiendo enfrentar las tinieblas.

