Resumen Breve
Este video explica los antipsicóticos, medicamentos esenciales para tratar psicosis como la esquizofrenia. Se clasifican en clásicos y atípicos, diferenciándose en sus mecanismos de acción y efectos secundarios. El video destaca cómo los antipsicóticos atípicos, al actuar sobre receptores serotoninérgicos, minimizan los efectos extrapiramidales y mejoran los síntomas negativos, ofreciendo una mejor calidad de vida a los pacientes. Además, aborda el problema del incumplimiento terapéutico y cómo las formulaciones inyectables de larga duración pueden mejorar la adherencia al tratamiento.
- Antipsicóticos clásicos vs. atípicos: diferencias en efectos secundarios y mecanismos de acción.
- Importancia de la adherencia al tratamiento en la esquizofrenia.
- Beneficios de las formulaciones inyectables de larga duración para mejorar el cumplimiento.
Introducción a los Antipsicóticos
Los antipsicóticos se utilizan para tratar diversas formas de psicosis, como la esquizofrenia, la manía depresiva psicótica y la agitación. La clorpromazina fue el primer antipsicótico, pero el haloperidol marcó una época en el tratamiento de la esquizofrenia hasta la llegada de la clozapina, el primer antipsicótico atípico. Inicialmente, estos fármacos se llamaban neurolépticos debido a la rigidez que producían en los pacientes, quienes permanecían tranquilos pero indiferentes al entorno. Aunque no curan la enfermedad, los antipsicóticos mejoran la evolución clínica y la calidad de vida de los pacientes, permitiendo su reinserción en el entorno familiar.
Clasificación y Mecanismos de Acción de los Antipsicóticos Clásicos
Los antipsicóticos se clasifican en clásicos y atípicos. Los clásicos son principalmente antagonistas de los receptores dopaminérgicos D2, aunque también actúan sobre otros receptores. Su principal efecto es el bloqueo de la dopamina en todas las vías dopaminérgicas, lo que puede llevar a efectos secundarios importantes. En la vía mesolímbica, el bloqueo de los receptores D2 reduce la hiperfunción dopaminérgica, mejorando los síntomas positivos. Sin embargo, en la vía mesocortical, el bloqueo de estos receptores no mejora los síntomas negativos y puede incluso empeorarlos.
Efectos Secundarios de los Antipsicóticos Clásicos
En la vía nigroestriatal, el aumento del bloqueo dopaminérgico puede desencadenar un síndrome similar al Parkinson. En la vía tuberoinfundibular, los antipsicóticos clásicos antagonizan el efecto de la dopamina, aumentando la secreción de prolactina y causando efectos indeseables. En resumen, los antipsicóticos clásicos mejoran los síntomas positivos, pero no tienen efecto sobre los síntomas negativos primarios y pueden producir síntomas extrapiramidales, afectivos, deterioro cognitivo e hiperprolactinemia.
Antipsicóticos Atípicos: El Concepto de Atipicidad
El concepto de atipicidad surgió para diferenciar el efecto clínico de los antipsicóticos clásicos de la inducción de síntomas extrapiramidales. La introducción de la clozapina demostró que se podía ser eficaz contra los síntomas positivos sin producir estos efectos adversos. Esta particularidad se debe fundamentalmente a su antagonismo preferente de los receptores serotoninérgicos 5HT2A sobre los D2. En condiciones normales, la serotonina inhibe la actividad dopaminérgica en ciertas áreas cerebrales, por lo que un antagonista de los receptores 5HT2A favorece la acción de la dopamina.
Mecanismos de Acción de los Antipsicóticos Atípicos en los Síntomas de la Esquizofrenia
En los síntomas positivos, tanto los antipsicóticos clásicos como los atípicos actúan sobre los receptores D2. El bloqueo 5HT2A no afecta la vía mesolímbica, respetando la eficacia antipsicótica del atípico. En los síntomas negativos, la facilitación dopaminérgica desencadenada por los inhibidores 5HT2A potencia la acción dopaminérgica y reduce la sintomatología negativa. En los síntomas extrapiramidales, el bloqueo D2 se compensa a dosis estándar por la acción antagonista sobre 5HT2A. La atipicidad también se asocia a la velocidad de disociación del receptor dopaminérgico, siendo más rápida en los atípicos, lo que reduce los efectos adversos.
Otros Beneficios de los Antipsicóticos Atípicos
A nivel tuberoinfundibular, el antagonismo 5HT2A divide el incremento de prolactina, disminuyendo la incidencia de efectos indeseables. En los síntomas afectivos, los antipsicóticos atípicos reducen la incidencia de la depresión. Además, la administración continuada de atípicos produce un aumento de receptores 5HT2C similar al de los antidepresivos. En cuanto al déficit cognoscitivo, los antipsicóticos atípicos no tienen el efecto negativo de los clásicos sobre las funciones cognitivas. La atipicidad no es exclusiva del bloqueo 5HT2A, y cada antipsicótico atípico presenta un perfil receptor único.
Cumplimiento Terapéutico y Formulación Inyectable de Larga Duración
El manejo efectivo de la esquizofrenia requiere la administración ininterrumpida del tratamiento antipsicótico, pero el incumplimiento terapéutico es muy habitual. La tasa de incumplimiento aumenta tras el alta hospitalaria, llegando a ser del 50% al cabo de un año y del 75% a los dos años. La adherencia terapéutica se complica por factores como la falta de conciencia de la enfermedad y la tolerabilidad de los antipsicóticos. Una formulación inyectable de larga duración, administrada por el equipo terapéutico, puede mejorar el cumplimiento, liberando al paciente y a su familia de la carga de la toma diaria y permitiendo una intervención rápida en caso de incumplimiento.