Breve Resumen
El video presenta un extracto del Evangelio de los Esenios, que contiene las palabras originales de Jesús sobre la alimentación y la salud. Se destaca la importancia de respetar el cuerpo como templo del espíritu y se denuncia el consumo de carne como perjudicial, relacionándolo con enfermedades y sufrimiento. Jesús insta a seguir una dieta basada en hierbas, semillas, frutos y leche, evitando la carne y la sangre de los animales. Además, se aborda la diferencia entre los mandamientos de Moisés y las enseñanzas de Jesús, explicando que los primeros fueron una adaptación a la incapacidad del pueblo para seguir los mandamientos divinos originales.
- El cuerpo es el templo del espíritu, por lo que debe ser respetado y purificado.
- El consumo de carne es perjudicial para la salud y el espíritu.
- Jesús promueve una dieta basada en hierbas, semillas, frutos y leche.
- Los mandamientos de Moisés fueron una adaptación a la debilidad del pueblo.
Introducción
El canal Proyecto Avatar presenta su misión de contribuir al despertar de la raza humana a través de la verdad revelada con amor. En esta ocasión, publican las palabras puras y originales de Jesús, encontradas en el Evangelio de los Esenios, traducidas directamente del arameo. El enfoque principal de este extracto es el discurso de Jesús sobre los efectos perjudiciales de comer carne de animales. Se subraya cómo las palabras de Jesús, ignoradas y distorsionadas durante siglos, están siendo validadas por la ciencia moderna, que reconoce los beneficios de una alimentación más consciente y respetuosa con la vida.
El Cuerpo como Templo
Jesús enfatiza la importancia de no profanar el cuerpo ni el espíritu, ya que el cuerpo es el templo del espíritu y el espíritu es el templo de Dios. Para que Dios habite en el templo, este debe estar purificado. Jesús critica la glotonería y la embriaguez, señalando que estas prácticas multiplican las deudas que deben ser reparadas con el cuerpo. Sin embargo, también reconoce las buenas acciones escritas en el cuerpo y el espíritu, prometiendo una herencia en el reino terrenal y celestial, donde se encontrará la vida eterna y se evitará la enfermedad.
Pecados y Enfermedades
Ante la pregunta sobre qué pecados evitar para no conocer la enfermedad, Jesús recuerda el mandamiento de "no matarás", explicando que Dios da la vida a todos y nadie tiene derecho a arrebatarla. Afirma que todo lo que vive en la Tierra procede de una misma madre, por lo que quien mata a un animal, mata a su hermano. La madre terrenal se alejará de quien comete este acto, y Satán habitará en su cuerpo. La carne de los animales muertos se convierte en la tumba de quien la consume, envenenando su sangre, llenando su cuerpo de hedor y descomposición, y conduciendo a una muerte similar a la del animal sacrificado.
Alimentos Permitidos
Jesús insta a no matar ni comer la carne de animales inocentes para no convertirse en esclavos de Satán y evitar el sufrimiento y la muerte. En cambio, ofrece una alternativa: toda hierba que lleva semilla, todo árbol con fruto y la leche de los animales serán el alimento del hombre. Sin embargo, prohíbe comer la carne y la sangre de los animales. Quien mata a un animal sin causa justa, solo por el deseo de comer su carne, se convierte en una bestia salvaje y tendrá un fin similar al de los animales salvajes.
Moisés y los Mandamientos
Ante la pregunta de por qué Moisés permitió comer carne de animales limpios, Jesús explica que Moisés dio mandamientos menos duros porque el pueblo no era capaz de seguir los mandamientos de Dios. Si los antepasados hubieran sido capaces de seguir los mandamientos divinos, Moisés no habría tenido necesidad de adaptar la ley. Jesús compara los mandamientos de Moisés con muletas, necesarias para aquellos cuyos pies son débiles, pero innecesarias para aquellos que son fuertes en sus decisiones.

