Resumen Breve
El video explora por qué los seres de luz no intervienen en los problemas de la humanidad y del planeta Tierra. Se discute la diferencia entre la percepción humana de los seres de luz como salvadores y su verdadera naturaleza, que trasciende la dualidad del bien y el mal. Además, se aborda la idea de que la Tierra es un planeta de experimentación con múltiples intereses de otras especies, y que la humanidad tiene la capacidad de elegir su propio destino, ya sea la evolución o el colapso.
- La Tierra no pertenece a la humanidad, sino que es un planeta de experimentación con múltiples intereses.
- La humanidad tiene la capacidad de elegir su propio destino, ya sea la evolución o el colapso.
- Los seres de luz no intervienen porque la humanidad se deja explotar y debe asumir la responsabilidad de sus decisiones.
Introducción: ¿Por qué los seres de luz no intervienen?
Se plantea la pregunta de por qué los seres de luz no intervienen en los problemas de la humanidad y del planeta Tierra, contrastando con la idea de intervenciones en la antigüedad. Se enfatiza que el planeta Tierra no pertenece a ninguna raza en particular, lo cual es crucial para entender por qué estos seres no se sienten obligados a asistir a la humanidad. Se destaca que la percepción humana de los seres de luz como justicieros y salvadores es una visión terrenal y programada, limitada por nuestro nivel de conciencia.
La verdadera naturaleza de los seres de luz
Se explica que los seres de luz operan a un nivel de conciencia que trasciende la dualidad del bien y el mal, lo que dificulta su comprensión desde una perspectiva humana. Se advierte sobre el falso concepto de que un ser de luz debe tener una apariencia física luminosa, ya que esto es una programación de tercera dimensión. Se subraya que la humanidad posee soberanía sobre su destino, pero permite la explotación de su alma.
El destino de la humanidad y la intervención
Se aclara que la falta de intervención no significa que no existan seres que velan por la justicia, pero su enfoque es diferente al esperado. Se describe la Tierra como un planeta de experimentación con múltiples intereses de otras especies, algunas de las cuales son depredadores energéticos. Se plantea que la humanidad tiene la posibilidad de evolucionar o colapsar, y que hay numerosas especies interesadas en el alma humana y en los recursos de la Tierra.
Intereses y la elección del destino
Se menciona que muchas razas que se creen como seres de luz están intervenidas. Se argumenta que si una raza tuviera un interés genuino en intervenir contra la injusticia, ya lo habría hecho, pero esto no sucede porque hay factores que la humanidad no comprende. Se insiste en que la humanidad está eligiendo su destino al permitir la explotación, y que si continúa así, no habrá salvación externa.
Conclusión: La responsabilidad de la humanidad
Se reitera que cualquier intervención en la Tierra se hará por interés, no por altruismo. Se critica la programación que hace creer a la humanidad que los seres de luz están obligados a salvarla. La conclusión final es que los seres "buenos" no intervendrán porque la humanidad se deja explotar. Aunque existen seres con un nivel de conciencia superior, entienden la situación de manera diferente y no se sienten obligados a intervenir si la humanidad elige ser explotada.

