Breve Resumen
El video describe los primeros años de la dictadura de Francisco Franco en España, desde el fin de la Guerra Civil en 1939 hasta finales de la década de 1950. Se abordan temas como la represión de los vencidos, el establecimiento de un estado totalitario, el aislamiento internacional, la autarquía económica, la escasez y el racionamiento, y el cambio gradual hacia una apertura económica y el reconocimiento internacional del régimen.
- El régimen de Franco se consolida sobre tres pilares: el ejército, el partido único y la Iglesia.
- La represión y el exilio marcan el destino de los republicanos.
- La autarquía económica y el aislamiento internacional generan escasez y pobreza.
- A finales de los 50, se produce una apertura económica y un acercamiento a Estados Unidos.
El Fin de la Guerra Civil y el Ascenso de Franco al Poder
El 1 de abril de 1939 marca el fin de la Guerra Civil Española, dejando un país devastado con alrededor de 300,000 muertos. Francisco Franco, autodenominado "El Caudillo", emerge como el gobernante absoluto, concentrando en sus manos la jefatura del Estado, la presidencia del gobierno, el mando de las fuerzas armadas y la jefatura del partido único, la Falange Española Tradicionalista. El 19 de mayo de 1939, Franco preside un gran desfile militar en Madrid, donde participan representaciones de los ejércitos italiano y alemán que apoyaron su victoria. La Iglesia católica recupera su poder e influencia, y el Estado se declara confesional católico.
El Establecimiento del Estado Totalitario
Franco instaura un estado totalitario que suprime las libertades democráticas, prohíbe los partidos políticos y sindicatos, y deroga los estatutos de autonomía del País Vasco y Cataluña, persiguiendo sus lenguas. Los medios de comunicación son sometidos a una férrea censura y los funcionarios públicos son depurados. La dictadura se apoya en el ejército, el partido único y la Iglesia.
Represión y Exilio de los Republicanos
Cerca de medio millón de españoles huyen a Francia, donde muchos son recluidos en campos de refugiados. Los que permanecen en España son detenidos y enviados a campos de prisioneros. Alrededor de 40,000 presos son condenados a muerte y fusilados. La represión sobre los derrotados es una de las bases del nuevo régimen, y el estado de guerra se mantiene hasta 1948. En el interior de España, los "maquis" mantienen una lucha de guerrillas contra el régimen.
Aislamiento Internacional y Autarquía Económica
Con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, España inicialmente se declara neutral, pero luego se alinea con Alemania. Franco se reúne con Hitler en Hendaya en 1940, pero no llegan a un acuerdo sobre la entrada de España en la guerra. Franco autoriza la formación de la División Azul para luchar en el frente ruso junto a Alemania. Tras la derrota del fascismo en Europa, el régimen de Franco queda aislado internacionalmente. En 1946, las Naciones Unidas niegan a España la entrada en su organización y recomiendan a los países miembros que rompan relaciones con el régimen.
El Nacionalcatolicismo y el Referéndum de 1947
Ante el aislamiento internacional, Franco modifica su política, dando más protagonismo a los católicos en el gobierno y distanciándose del fascismo. Se celebran concentraciones religiosas masivas. En 1947, se organiza un referéndum para aprobar la Ley de Sucesión, que define a Franco como jefe vitalicio del Estado y le reconoce el derecho a elegir a su sucesor. La ley es aprobada con un alto porcentaje de votos, considerado el primer "pucherazo" del régimen.
Acercamiento a Estados Unidos y Reconocimiento Internacional
A partir de 1950, los embajadores regresan a España después de que la ONU suspenda las sanciones contra el país. En 1953, se firma el Concordato con la Santa Sede y un tratado de amistad y cooperación con Estados Unidos, que permite la instalación de bases militares norteamericanas en España a cambio de ayuda económica. En 1955, España ingresa en la ONU, culminando el reconocimiento internacional del régimen.
El Fin del Sueño Imperial y la Inauguración del Valle de los Caídos
En 1956, España concede la independencia a Marruecos, poniendo fin a su sueño imperial. En 1959, Franco inaugura el Valle de los Caídos, un monumento en memoria de las víctimas de la Guerra Civil.
Pobreza, Racionamiento y Extraperlo
La España de posguerra es un país en ruinas, con pobreza, hambre y enfermedades. El Estado implanta el racionamiento, pero el "extraperlo" (mercado negro) florece para abastecer a los más pudientes. La falta de alimentos y las malas condiciones de vida provocan una gran mortandad. La sequía agrava la situación, y el régimen justifica la escasez de pan con la "pertinaz sequía".
Autarquía e Industrialización
El sueño económico del franquismo es la autarquía, el autoabastecimiento del país. Se pone en marcha el Instituto Nacional de Industria (INI) para impulsar la industrialización, pero el bloqueo internacional dificulta la importación de maquinaria y materias primas. La escasez de gasolina obliga a recurrir a soluciones ingeniosas como coches a pedales y taxis con baterías.
Apertura Económica y Estabilización
A finales de los años 50, la situación económica es crítica y España está al borde de la bancarrota. En 1959, se aprueba un plan de estabilización que liberaliza la economía, abre el mercado español al exterior y autoriza la entrada de inversión extranjera. La peseta sufre una devaluación.