Resumen Breve
El video explora cómo la vibración de la Tierra ha sido manipulada, especialmente a partir de 2020, para acostumbrar a la humanidad a un estado de "pudrición" y catástrofes constantes. Se discuten eventos pasados como la extinción de los dinosaurios y la introducción de delfines y ballenas para equilibrar la energía terrestre. El autor sugiere que la situación actual es parte de una agenda para preparar a la humanidad para eventos futuros negativos, instando a la audiencia a ser conscientes de la energía del entorno.
- El año 2020 marcó un punto de inflexión negativo en la vibración de la Tierra debido al pánico mundial inducido.
- La manipulación de la vibración terrestre tiene como objetivo acostumbrar a la humanidad a catástrofes y un estado general de "pudrición".
- La Tierra tiene mecanismos de recalibración energética, pero la baja vibración humana dificulta este proceso, perpetuando un ciclo de oscuridad y desolación.
Introducción
El video comienza planteando el año 2020 como un punto de inflexión significativo, un año en el que, según el autor, se produjo un cambio energético negativo orquestado por una agenda oculta. Se argumenta que este cambio no fue un salto cuántico positivo, sino un descenso en la densidad energética de la Tierra, afectando la percepción y la vivacidad de la vida cotidiana. El autor sugiere que antes de 2020, las cosas eran diferentes, más "vivas", en contraste con el estado actual que describe como "podrido".
El Impacto Vibracional de 2020
El autor explica que en 2020 se produjo un cambio vibracional negativo en la Tierra, causado por el pánico mundial generado por ciertos eventos (menciona el "tema del Corona" sin nombrarlo directamente para evitar la censura). Este pánico fue canalizado para bajar el núcleo energético de la Tierra. Se compara esta situación con la época jurásica, donde la vibración terrestre era baja debido al desequilibrio entre los dinosaurios y el ecosistema. Los dracos de Alfa draconis crearon a estos dinosaurios, generando un estado vibracional bajo en la tierra. A diferencia de ese entonces, la tierra se encontraba en un estado muy alto porque no había humanos, arcontes, tecnología.
Intervención Extraterrestre y Reequilibrio
Para liberar a la Tierra de la baja vibración causada por los dinosaurios, los surma de orión lanzaron un proyectil que generó un cataclismo. Tras este evento, los abgal de sirio introdujeron delfines y ballenas en la Tierra, ya que estos anfibios emiten una frecuencia que reequilibra la energía vibracional, elevando la vibración de la Tierra. En contraste, el autor señala que en 2020 ocurrió lo opuesto, con un pánico mundial que llevó a una vibración más baja.
La Falacia Mental y el Acostumbramiento a la Pudrición
El autor describe el 2020 como un año en el que se impuso una "falacia mental" basada en el miedo, lo que permitió bajar la vibración de la Tierra. Esto, según él, tiene el propósito de acostumbrar a la humanidad a catástrofes y a un estado de "pudrición". A partir de 2021, energías del espacio comenzaron a llegar a la Tierra, pero debido a su baja vibración, no impactaron de la manera esperada. El autor desmiente la idea de un "reset total" energético en diciembre de 2020, afirmando que la energía entrante no causa un despertar inmediato.
La Agenda Oculta y la Aceptación del Mal
El autor argumenta que la agenda detrás de la manipulación vibracional es acostumbrar a la humanidad a aceptar el mal y las catástrofes como algo normal. Señala que la gente se ha acostumbrado a las guerras y a los cambios climáticos, y que esta aceptación es parte de un plan mayor. El autor lamenta que no habrá capacidad para quejarse, sino que la gente tendrá que aceptar todo el mal que está por venir.
La Energía del Entorno y la Pérdida de Esencia
El autor invita a la audiencia a realizar una prueba: caminar por la calle, abrir su cuerpo astral y dejarse llevar por la energía del entorno. Según él, esta experiencia revelará que todo está "como el culo", confirmando su percepción de un estado general de "pudrición". El autor explica que la Tierra tiene un mecanismo de recalibración automática de energía, pero que la baja vibración de la humanidad dificulta este proceso. Además, señala que muchas personas han perdido su esencia, lo que contribuye a la oscuridad y desolación del entorno.

