Resumen Breve
Este video explora el problema de la basura en la Ciudad de México, destacando que la ciudad es un organismo que consume y desecha, generando una gran cantidad de residuos diarios. Se discute la responsabilidad compartida entre ciudadanos, empresas y gobierno para reducir la generación de residuos y mejorar su manejo. Además, se examina el impacto del consumo de plásticos y la necesidad de cambiar la mentalidad sobre la basura, promoviendo la composta y la reducción del consumo.
- La Ciudad de México produce 12,300 toneladas de basura al día.
- El reciclaje actual no es suficiente para solucionar el problema de la basura.
- La composta es una alternativa viable para reducir los desechos orgánicos.
La Ciudad y la Basura
La ciudad es comparada con un organismo vivo que consume, se mueve y desecha, generando basura como un subproducto inevitable. Se menciona que la creación de la ciudad implica el sacrificio de cañadas y valles para depositar los desechos, lo cual tiene un costo ambiental significativo, incluyendo el calentamiento global y la contaminación del agua. Se plantea la necesidad de transformar esta línea de desgaste en un ciclo de vida sostenible.
El Problema de la Basura en la Ciudad de México
Se busca convertir la Ciudad de México en una ciudad de "basura cero", aunque actualmente se producen 12,300 toneladas diarias de residuos. Aunque se cree que la mayor cantidad de residuos proviene de las industrias, la mayor parte sigue siendo de origen doméstico y de servicios. Es crucial encontrar formas de reducir la cantidad de residuos generados y manejar adecuadamente los que se producen, dándoles una segunda vida. Se argumenta que prohibir los plásticos podría ser más efectivo que invertir en su manejo.
Impacto Ambiental de los Residuos
Se describe un tiradero a cielo abierto, común en México, donde la Ciudad de México deposita aproximadamente 12,000 a 12,500 toneladas de residuos al día, y la zona metropolitana llega a depositar hasta 21,000 toneladas. La relación entre el cambio climático y los residuos es directa, ya que la basura produce gases de efecto invernadero. Se enfatiza que la responsabilidad de la basura no termina al sacarla de casa, sino que es un problema de todos, requiriendo separar los residuos y reducir el consumo.
Consumo de Plásticos y Reciclaje
Cada año se produce una cantidad de plástico mayor al peso de toda la humanidad. En México, el consumo de comida chatarra y bebidas azucaradas contribuye significativamente a la generación de desechos plásticos. Se critica que las corporaciones y regulaciones no se preocupan por el daño generado por el modelo de consumo. Se desmiente la idea de que el reciclaje es una solución completa, ya que solo se recicla alrededor del 9% de los residuos a nivel global y el proceso consume energía y recursos.
La Ciudad como Aparato Metabólico
La ciudad es un aparato metabólico que demanda energía, materiales y minerales, generando desperdicios que se trasladan a otros lugares, creando "zonas de sacrificio". Se explica cómo el mercado revaloriza zonas como Santa Fe, moviendo el problema del desperdicio a otras áreas periféricas y marginalizadas. Se propone transformar la organización de la ciudad, priorizando los derechos de la gente y el acceso a un hogar, en lugar del valor del mercado.
Composta como Solución
Entre el 40% y el 50% de los desechos de una ciudad son orgánicos, lo que significa que la mitad de la basura de la Ciudad de México podría convertirse en composta. Se describe un proyecto donde se recolectan desechos orgánicos de la Ciudad de México y el Valle de Toluca para transformarlos en composta, que luego se devuelve a las personas que participan en el proyecto. Actualmente, más de 9,000 familias en México están proporcionando sus desechos orgánicos cada semana, generando cuatro toneladas diarias de composta.
Reducción del Consumo y Felicidad
Si el 50% de los desechos son orgánicos y compostables, ¿qué hacer con el otro 50%? Se enfatiza que, por mucho que se recicle, el nivel de consumo actual es insostenible. Se cuestiona la romantización del consumo que da estatus y se propone dejar de consumir y de creer que ciertos productos son necesarios. Se critica que las empresas prometen felicidad a través de sus productos, pero deberían comprometerse a cumplir un ciclo completo y hacerse cargo de sus residuos. Se propone compostar la crisis creada por el modelo fósil, destacando que la resistencia a este modelo también es global.
